Es difícil describir los sentimientos que me embargan estos días.
El Gobierno decreta el Estado de Alarma, un virus descontrolado nos invade y puede acabar con la vida de los más débiles. Es estremecedor pensar en nuestros mayores, a los que yo especialmente tengo mucho cariño y respeto, por tratarles en mis clases y constatar día a día su gran valor humano, sabiduría, su humildad, su gran disciplina y voluntad, a pesar de los años, a pesar de los daños, sonríen y se ilusionan como niños, son un maravilloso tesoro de esta sociedad, que hay que preservar a toda costa.
Os envío mis bendiciones a todos, y eso que no soy muy religiosa en el sentido convencional de la palabra. Os quiero, a todos y cada uno.
Por otro lado, siempre, siempre, siempre, hay un lado positivo en todas las circunstancias de la vida, y aunque ahora parezca que todo va a la deriva, no es así. Se respiraba hace un tiempo, yo lo sentía así, como que algo iba a pasar, estábamos llegando a un callejón sin salida, políticamente (como reflejo de una sociedad insatisfecha) climatológicamente, con tormentas nunca antes vistas, inundaciones, etc.. y humanamente, con las guerras y sus correspondientes éxodos, que no son otra cosa que el resultado de la intolerancia, el miedo y la codicia humana. Todo esto tiene que llegar a su fin si queremos de verdad dejar un mundo mejor a nuestros menores.
Yo decreto el Estado de Calma vs estado de Alarma.
Estos días de confinamiento, hemos de aprender a empezar por el principio, es decir, por nosotros mismos, cuidándonos, mimándonos, encontrando esos espacios de calma, de atención plena al momento presente. Es sencillo y es revelador.
Mis principios éticos y morales de los estoicos, exactamente, y de un maestro en particular, Epicteto. Os animo a todos a leer este pequeño librito, un Manual de Vida, si queréis conocerme un poco más, y conocer esta gran lección para la vida.
Este Gran Maestro nació esclavo allá por el año 55 a.c. y fue liberado gracias a su gran sabiduría. De él se conoce la famosa frase:
"Concedédme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las que sí puedo, y la sabiduría para establecer esta diferencia".
Maravilloso no? y en plena vigencia actualmente. De hecho Epicteto fue el precursor de nuestra psicología moderna. Esta frase es el principio sólo de una gran cantidad de pensamientos a mi parecer, maravillosos. Todo el mundo debería tener este librito en la mesita de noche.
Esto en cuanto a la mente, en cuanto al corazón, sigo el Budismo de Cachemir, un budismo muy antiguo fundado y consagrado por mujeres, las denominadas yoguini.
Su precursora Lalita Devi. No me enrollaré mucho, sólo deciros que esta brillante mujer nacida en las montañas de Cachemira, descubrió como vivir serenamente su pasión por la vida. No había templos entonces, el cuerpo y la mente eran el Templo Sagrado, lo que más había que honrar y cultivar, ahí nació la Danza Sagrada, Tandava y también la conciencia del presente absoluto, lo que llamamos meditación. Los hombres eran entonces los aprendices de estas mujeres elegidas por ellos mismos para enseñarles a vibrar energéticamente y expandir su conciencia más allá de las formas.
Su experiencia del presente, de cada instante, la felicidad de cada momento, radicaba en la atención desnuda en cada instante, cada segundo.
La alegría, la risa, el movimiento, la meditación en movimiento.. que gran aportación para el alma humana!, se acabó lo estático, lo rígido, enseñaban a fluir con alergría abriendo el chakra del corazón con distintas visualizaciones y meditaciones que yo he tenido el placer de experimentar en los seminarios que imparte en Barcelona su último discípulo, Daniel Odier, que recientemente ha cancelado como todos, su seminario en Barcelona para el 21 y 22 de marzo, que tenía pagado desde hace un año aprox, pero ese es otro tema. Se nota que tengo tieeeempo. Uno de sus mejores libros, "Deseo, Espiritualidad y pasión".
En definitiva y para acabar, recomendaciones prácticas para estos días de confinamiento:
- Cocinad sin prisas, atentos a cada gesto, a cada sensación que recibe el cuerpo a través de los sentidos, los olores, sabores, texturas, todo nos lleva a conectar con el momento presente, a meditar en movimiento, aunque sea en la cocina. Nos convertimos en las Diosas del Hogar.
- Dedicad algo de tiempo al ejercicio, tenemos suerte de ser amantes del Chi-kung y el Tai-Chi en estas circunstancias, ambas artes se pueden practicar en espacios reducidos. El Tai-chí en su formato
I-Chuan, con un paso avanzado como hacemos en el precalentamiento en clase. Utilizad los videos de mi canal de YouTube o el DVD, las 8 joyas están a vuestra disposición 24h al día, así como videos cortos de partes de las diferentes Formas. La segunda joya, Separar el Cielo y la Tierra debería hacerse a diario.
- Algo de tiempo a escuchar música, a la lectura, a la escritura, incluso a pintar o dibujar. Es liberador encontrar un actividad plástica en la que podamos desarrollar la creatividad. Todos podemos crear.
También recomiendo un libro extraordinario de una de mis autoras preferidas Elisabeth Gilbert "Libera tu Magia" maravilloso.
- Comunicación. No todo tiene que ser ocupaciones introspectivas. En estos días la comunicación verbal es lo poco que nos queda para relacionarnos con los demás. Así que quemad los teléfonos, llamad a viejos amigos, familiares, es momento de preocuparnos y ocuparnos, aunque sea poniendo el oído. Nuestros mayores, insisto, necesitan nuestra atención y nuestro mimo, aunque sea telefónico, es muy reconfortante.
- Descansad bien, dormid a pierna suelta.
Os echo de menos, pero pensad, que volveremos con más ganas que nunca, y con una energía diferente, mejor si cabe, con una mayor sensación de gratitud, de poder hacer libremente aquello que nos gusta, y compartirlo con otros, que gran regalo! Recordad también que en mayo nos volvemos a reunir en la Garrotxa, que ganas!
Os deseo una feliz estancia en casa!
un abrazo afectuoso
Alicia
Recordad también que no hay nada más importante que nuestra actitud ante los acontecimientos. Ya hay mucha información y alarmismo en los medios, y cómo decía Epicteto, eso, no lo podemos cambiar, pero cómo actuamos ante esa información, si.
Mi hijo por ejemplo dice que mientras tenga su música y un fuet, todo va bien 😉
Disfrutad de las pequeñas cosas que aún tenemos es fundamental, y consejo personal, está bien estar informado, pero en su justa medida. Esa medida es algo que también está en nuestras manos.
CALMA vs ALARMA