Dentro de la medicina china se observan muy detenidamente estos ciclos para ver cómo nos afectan física, psicológica y emocionalmente. Sabemos que el órgano más afectado en este período va a ser el riñón, los riñones. Estos órganos son considerados de vital importancia dentro de MTC, de hecho hay dos, por si uno falla. Los riñones son los contenedores de nuestra Esencia vital, nuestra energía Jing, la energía física de nuestro cuerpo, la energía heredada de nuestros padres, lo que llamamos la herencia genética hoy, los chinos lo desconocían con ese nombre hace miles de años, pero ya sabían que existía algo parecido, el Jing. Si observamos bien de hecho los riñones tienen forma de embrión, contienen toda la esencia concentrada, son como la semilla energética de nuestro cuerpo.
Un buen cuidado de nuestro Chi de riñón nos puede alargar mucho la vida, al igual que la calidad del agua que ingerimos y nuestros dos riñones filtran y procesan. Lo contrario a ese impulso vital contenido en el riñón por otro lado, ¿qué podría ser? Pues ciertamente el Miedo. El Miedo es la emoción que controla los riñones. Emoción que puede bloquear seriamente el flujo de chi en este órgano produciendo graves daños, incluso la muerte. Cuando el Chi de riñón se debilita o desaparece, se acaba la vida física. El Miedo es Anti-vida. Los miedos que se asocian al riñón no sólo son los más visibles, si no los Inconscientes, esos de los que no somos totalmente conscientes. Muchas personas sufren lumbalgias repentinas justo antes de iniciar un viaje o un nuevo proyecto, "el miedo" les paraliza de algún modo y se somatiza en la zona lumbar.
Tiene mucha coherencia que sea precisamente en invierno cuando suelen aflorar más estos miedos, ya que desde que el hombre es hombre, el invierno ha sido la estación más difícil para la supervivencia, por muchas razones, el frío, la falta de comida, las enfermedades, etc.
Y aunque ahora nos protejamos en pisos y casas adecuadamente aclimatadas, lo cierto es que ese miedo ancestral sigue estando en nuestro ADN formando parte de nuestra naturaleza más sutil.
Por eso es interesante ser consciente de ello y entender, que somos parte de la naturaleza, que estamos supeditados a los ciclos naturales más de lo que imaginamos y que podemos protegernos en invierno, y no necesariamente con jerséis gruesos o bufandas.
Mi propia intuición y sabiduría interna si se precisa, me dice que hay varias formas de contrarrestar esos miedos conscientes o inconscientes, la primera y más vieja fórmula creo que es la de COMPARTIR. Puede parecer extaño, pero si comparto mis temores más profundos (y no hace falta que sea en una cueva con un buen fuego, aunque si fuera así estaría muy bien también) se disipan esas emociones de angustia y miedo y el riñón vuelve a drenar felizmente. Se dice que los males compartidos duelen menos, no? pues parece que es cierto. Los niños también sufren las inclemencias del invierno, y no solo con repetidos resfriados, también suelen haber más pérdidas de orina en las noches de invierno, por la misma razón, hay más pesadillas, el inconsciente está más inquieto.
Además, siempre ha sido en invierno cuando los humanos se han sentado más cerca, más juntos, para conversar, para compartir sus preocupaciones, sus temores, su soledad. Por ello no hay nada que nos alegre más una fría noche de invierno que conversar íntimamente con un ser querido, nos consuela y nos protege a la vez. Y es que las buenas costumbres son lo más terapéutico, aquí, en China y en Noruega.
Mi primer consejo genuino para este invierno, no descrito hasta ahora en ningún papel (que yo conozca) es entonces el siguiente: Mantener el máximo de conversaciones sinceras y profundas con las personas que más atiendan a esas necesidades. Si puedes incluir algún abrazo afectuoso muchísimo mejor, y si te da para algo más...pues mejor que mejor! por y para tu chi de riñón y el de corazón.
Segundo y no menos importante (este puede ser que este descrito en algún libro o recetario) Tapar y/o Cubrir bien, o muy bien, toda la zona lumbar. No dejar jamás al aire lo que mi abuela llamaba "La riñoná" si no queréis que os de un aire y penetre en zona de riñón causando estragos. Tengo un amigo acupuntor en Granada, mi querido Chus, que está convencido de que la moda de los tops fue ideada para provocar disminución de energía en las jóvenes al exponer su riñonada a las energías perversas del frio y la humedad.
Tercero y último: Brindar con cava si, las veces que sea necesario, pero acostarse con un buen vaso de agua y levantarse con otro. Lo aderezas con limón, miel o gotitas de própoleo o equinachea, pero con AGUA por Dios!
Ah, y por último, casi se me olvida. Practica el Oso! No me refiero al oso perezoso que se mete en la cueva a invernar, no, ese no, el otro, el del Wu Chin Shi! si si, ese, el del juego de los 5 animales sagrados del Chi_kung. (Ver pestaña de Chi-kung). Una vez al día, practica este ejercicio con lentitud y suavidad y tus riñones quedarán masajeados y favorecerás la circulación de chi en ellos.
Y ya está. Si mantienes estas tres buenas costumbres en estos meses de frio llegarás pletórico/a a la primavera, y ahí ya te contaré, que no es oro todo lo que reluce!
Felices Fiestas Navideñas, que disfrutéis mucho de la familia, los amigos etc, y si por alguna circunstancia no encuentras a nadie que se preste a compartir el primer consejo, estoy a tu disposición, y seré toda oídos...
Un Abrazo fuerte y hasta pronto!
Alicia